Si los muebles, el parqué, las encimeras, las fundas, los cojines .. se van deteriorando hay que actuar. No se debe dejar pasar el tiempo, sino al contrario.
1º. Muebles:
Si están decolorados por el sol se puede tratar de recuperar su tono. Hay que darles una cera-tinte y dejarla secar aproximadamente una hora. Luego, se forta con un paño. Los muebles volverán a brillar.
Si los muebles han amarilleado, existe solución. A los lacados, a veces se les va quedando la grasa, así que se puede probar a limpiarlos con un paño humedecido en agua y unas gotas de amoníaco. Si no se quita es que las resinas de la laca se han oxidado; entonces, hay que lijar suavemente y luego dar un esmalte al agua con un rodillo.
2º. El parqué:
Cuando el parque se oscurece, suele deberse a que ha ido acumulando ceras, así que se tendrá que acuchilar y volver a barnizar. Para evitarlo, en vez de cera, se debe dar una renovado o abrillantador de base acuosa; protegen el suelo y se podrá rebarnizarlo sin tener que acuchillar.
Si el parqué está reseco por el calor o la calefacción, se puede nutrir con un aceite restaurador. También se puede dar a los muebles y las puertas si lo necesitan.
3º. Funda y cojines:
Si las fundas y los cojines han perdido color. Se puede probar a dejarlos en remojo en agua con un chorrito de vinagre. Se reavivará su tono. Por su lado, pueden aparecer bolitas en las fundas y los cojines. Entonces, si la tela puede plancharse hay que hacerlo al revés así se logrará disimular las bolitas.
4º. Encimeras de granito:
Si hay manchas de grasa, existen limpiadores en espuma que suelen quitarlas. Tras aplicarse, se deja actuar unos minutos y se enjuaga luego con agua. Se puede repitir la operación si hace falta. Una vez limpia, se le da un protector antimanchas para que le selle los poros y repela el agua, el aceite, …
Foto vía Vanessa Pascual